Carabobo.- La psicóloga valenciana Nieves Oliveira dijo para nuestra casa editorial que, aunque es común escuchar la frase “yo soy padre y madre», eso no es cierto, debido a que se ha demostrado biológica, psicológica y socialmente que la ausencia de alguna de estas dos figuras “no la suple nadie, aun cuando puede haber personas significativas que brindan apoyo, protección y nutren emocionalmente”.
El 19 de junio de 1909 Sonora se encontraba escuchando un discurso referente al Día de la Madre y fue cuando se le ocurrió que debía existir un día que conmemora la labor de los padres. La primera fecha que propuso fue el 5 de junio debido a que ése fue el día de nacimiento de su padre.
Con el pasar del tiempo esta idea tuvo mayor aceptación ante la sociedad y es por eso que el presidente de los Estados Unidos del año 1924, Calvin Coolidge, apoyó esta iniciativa de celebrar en toda la nación esta fecha tan especial, pero no fue hasta 42 años después cuando el presidente Lyndon Johnson firmó finalmente una proclamación que establecía que esta fiesta debía ser cada tercer domingo del mes de junio.
En Venezuela
Rápidamente esta celebración se fue expandiendo por todos los continentes, aunque se debe dejar claro que, así como hay países que mantuvieron la fecha de la festividad, en otros fue modificada. En el caso de Venezuela, continuó la tradición de aplaudir y honrar la labor de los padres venezolanos cada tercer domingo de junio.
La mayoría de las familias venezolanas poseen el hábito de no solo enaltecer a los padres, sino también a los tíos, primos o hermanos que han asumido el rol de figura paterna ante algún familiar o conocido.
