Carabobo.-Damnificados, pérdidas materiales han dejado las lluvias registradas este miércoles 10 de agosto en el occidente de Carabobo.
Desde la madrugada de este lunes iniciaron las precipitaciones en el occidente de Carabobo, tomado fuerza en horas del mediodía, cuando se desbordaron varios ríos y quebradas, además se anegaron diversas calles.
En Bejuma, los sectores más afectados fueron La Gran manzana, en donde el río se desbordó y afectó una humilde vivienda en donde habitaban seis niños y dos adultos., quienes perdieron sus enseres, cosecha y la vivienda quedó inevitable.
De igual manera en las invasiones Catire Acosta Carlez, dos familias debieron ser desalojadas por la Alcaldía y los Bomberos, debido al mal estado en el que quedaron tras el fuerte aguacero que duró más de siete horas.
La alcaldía de Bejuma debió habilitar un refugio provisional en una de las escuelas del municipio para albergar a las familias afectadas por las lluvias.
Las vías de acceso también se vieron comprometidas, hay calles en las que el agua alcanzó hasta el metro de altura y se metió a las casas como fue el caso del sector La Alegría, en donde el agua se metió a al menos tres viviendas.
En Tierra Negra y Tierra Blanca también estuvo obstaculizado el paso vial por la fuerte afluencia de agua. En Chirgua agricultores reportaron anegación del cultivo de maíz.
Funcionarios de la Alcaldía, Cuero de Bomberos Bejuma, Policía Municipal y Protección Civil, se encentraban pasada las 7.00 pm monitoreando las zonas afectadas. Se espera que en las próximas horas ofrezcan un balance oficial de la situación.
Crecida en Montalbán y Miranda
Habitantes del sector Aguirre en Montalbán, reportaron la crecida del río que obstaculizó el paso vial, de igual manera el río Onoto de Miranda, subió su nivel sin desbordarse, mientras que el de la Pericoca habría rebasado su nivel según lugareños, sin afectaciones.
Es de resaltar que la noche del martes una lluvia registrada en Miranda derrumbó parcialmente una vivienda de adobe en el sector Santo Tomas, en donde habitan cinco niños y dos adultos. La casa quedó en situación de riesgo, pero por no tener a donde ir la familia permanece en ella.
